Cuando somos niños nos invitan a soñar en grande, las películas, los libros, los cuentos son acompañantes de esos sueños que se van calando de a pocos en cada uno de nosotros. Años después nos despierta un golpe de realidad, nos damos cuenta que esas historias que nos ayudaron a forjar sueños no están tan a la mano como creíamos. Así, de a pocos, nos vamos acomodando a un mundo más hostil y con el pasar del tiempo nos acostumbramos a él. Es entonces cuando vamos remplazando esos sueños que teníamos de niños por unos más “alcanzables”, esas vidas de colores se convierten en vidas con estabilidad económica, y sin darnos cuenta, nos convertimos en seres auto-condescendientes.
Entre la monotonía de la rutina nuestros sueños infantiles se van desdibujando, para que aquellas materialidades que aparentan ser económicamente viables vayan tomando su lugar. Es así, cuando en el momento menos pensado hemos adoptado sueños que no son nuestros, la excitación de vivir se ha remplazado con mera satisfacción y la felicidad con estabilidad económica. Hoy, con esta historia que te compartimos, queremos invitarte a reflexionar sobre tu vida diaria, queremos que pienses si tus sueños infantiles han sido opacados por obstáculos y limitaciones. Este crack llamado Lucho Salcedo @SalcedoART, nos enseña que los sueños si se cumplen, que vivir del arte sí se puede y que solo se necesitan dos cosas: “pasión” y “constancia”, con este video esperamos que desempolven sueños para que la felicidad sea una realidad y no una mera fantasía:
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